🎯 #ImagenYLiderazgo | El debate migratorio en Estados Unidos volvió a encenderse este jueves tras la decisión de un juez del Distrito Norte de Texas de declarar inconstitucional la ley que permitía a estudiantes indocumentados pagar matrícula universitaria como residentes del estado. Esta medida, conocida como Texas Dream Act y aprobada en 2001 bajo la gestión del republicano Rick Perry, beneficiaba a cerca de 73.000 jóvenes indocumentados que estudiaban en Texas, brindándoles acceso a tarifas más accesibles para su educación superior. ¿Te gustaría saber cómo impactará esta decisión?

La demanda fue presentada por el Departamento de Justicia bajo la presidencia de Donald Trump, alegando que la ley discriminaba a ciudadanos estadounidenses en favor de extranjeros. El congresista demócrata Joaquín Castro, representante de San Antonio, lamentó el fallo y afirmó que “lastimará a los texanos”, recordando el origen republicano de la legislación. Por su parte, el senador estatal Brandon Creighton celebró el fin de la matrícula estatal para inmigrantes ilegales y compartió la orden del juez.

El gobernador republicano Greg Abbott respaldó la decisión, destacando que se aplicará de manera permanente en Texas. Según la organización Higher Ed Immigration Portal, la medida afecta a casi una quinta parte de los estudiantes indocumentados del país. La matrícula local para indocumentados en Texas, tras más de dos décadas de vigencia, ha quedado invalidada.

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